jueves, 20 de marzo de 2014

FAA acredita que el Boeing 787 alcanza el mayor nivel de seguridad

Por Ricardo J. Delpiano

Foto: Boeing
La Administración Federal de Aviación de los Estados Unidos (FAA, por sus siglas en inglés) y Boeing finalizaron una revisión exhaustiva de los sistemas clave del Boeing 787 Dreamliner, por medio de la cual concluyen que el programa de diseño y producción del B787 alcanza el mayor nivel de seguridad.

Las inspecciones comenzaron en enero de 2013 como consecuencia de los incidentes registrados. En esa oportunidad, la FAA encargó al equipo de revisión sistemas críticos del B787 (CSRT), una investigación exhaustiva sobre el diseño, certificación y producción del avión, con el fin de determinar si cumple o no con los estándares de seguridad, además de identificar y corregir problemas que surgieron antes y después del proceso de certificación.

“Creemos que las observaciones y recomendaciones que se presentan en este informe va a mejorar una certificación del avión ya sólida y el proceso de control de seguridad. Anticipamos que  nuestros mensajes serán de utilidad para el grupo y en última instancia, para la Secretaría de Transporte, el administrador de la FAA y el liderazgo de Boeing”, señalan en una carta Michael Kaszycki, encargado de la certificación de aeronaves de la FAA y Richard R. Ptacin, ingeniero de proyecto de Boeing Commercial Airplanes.

El CSRT identificó las siguientes observaciones respecto a las áreas de ingeniería:
  • Requisitos de diseño: Se identificó inconsistencias en los requisitos de diseño y verificación de éste. Boeing había establecido requisitos de diseño, pero estos requisitos fueron insuficientemente verificadas y/o validados adecuadamente, lo que resulto en una falta de coherencia en la fabricación de piezas, interrupciones operativas, entre otros. 
  • Responsabilidad: El CSRT identificó problemas de comunicación en temas de verificación a lo largo de la cadena de suministro.
  • Estándares de diseño y proceso de revisión: No se identificó problemas significativos con los requisitos de diseño o procesos de certificación. Sin embargo, se encontró casos en los que la supervisión Boeing adicional que habría ayudado a asegurar se siguieron procesos señalados cuando los diseños evolucionaron en el tiempo. 
  • Nuevas tecnologías: A pesar de que el B787 cuenta con nuevas tecnologías y diseños innovadores, el CSRT determinó que este factor no contribuyó en los problemas presentados, sino que fue una inadecuada aplicación. “La tecnología está bien entendida, pero algunos aspectos del diseño no cumplían con los requisitos”. 
  • Nuevas aplicaciones de la tecnología existente: Requisitos de diseño para nuevas aplicaciones de los componentes tradicionales no fueron verificadas de manera consistente.  
  • Modelo de negocio: Se determinó que Boeing es responsable de demostrar y mantener el cumplimiento con las regulaciones de la FAA. El modelo de negocio B787 utiliza varios niveles de proveedores para el diseño y la responsabilidad en la producción del avión. El equipo tomó nota de este enfoque y determinó que no contribuyeron en los problemas investigados.
Respecto a la fabricación, se estableció que:
  • Modelo de negocio: los proveedores experimentaron una curva de aprendizaje al utilizar los nuevos procesos de fabricación y montaje de Boeing, a pesar de que se afectó la tasa de producción de los componentes del B787. Sin embargo Boeing aumentó el apoyo directo a sus proveedores y está trabajando para remediar la cadena de suministros. 
  • Estructura: El CSRT no encontró problemas de ingeniería, de diseño o certificación, durante el examen del estabilizador horizontal y secciones de fuselaje de popa, aunque revisó algunos aspectos de engrosamiento estructural relacionados con los proceso de producción y montaje. 
  • Delegación de las inspecciones: la FAA y Boeing confían responsabilidades de inspección a terceros para los proveedores de nivel inferior. Para algunas inspecciones requeridas, la FAA puede delegar inspecciones a una organización autorizada o personas designadas por los proveedores.  
  • Política de la FAA: En la capacidad de producción de un fabricante de aviones se aplica una metodología de evaluación similar tanto al fabricante de aviones pequeños y de menor complejidad, como para el fabricante de aviones de gran tamaño y con cadenas de suministro extendidas. El CSRT observó que la política de certificación de la FAA no garantiza un plan basado en el riesgo integral.
Medidas correctivas

Foto: Boeing
Para cuestiones de ingeniería, el CSRT identificó que algunas medidas correctivas se incorporaron en forma inmediata en las unidades en producción, otras se anotaron cambios planificados en la próxima actualización del sistema, pero para la mayoría de los temas en cuestión, se desarrolló un programa de modificación de los aviones en servicio.

Para hacer frente a los pocos problemas de seguridad presentados, Boeing, sus proveedores y la FAA trabajaron en conjunto en acciones correctivas a través de directivas de aeronavegabilidad, con el fin de mejorar el producto. En los casos analizados, el CSRT encontró acciones correctivas aceptables desde el inicio y que el nivel de urgencia se había establecido para cada una de las acciones correctivas.

En los problemas de fabricación, Boeing y las inspecciones de calidad de sus proveedores ya habían identificado los problemas y habían iniciado o totalmente implementado, las acciones correctivas. En algunos casos, los problemas se habían identificado y corregidos antes de que la FAA emitiera el certificado de aeronavegabilidad.

Por consiguiente, el informe del CSRT concluye que a fecha de hoy, el B787 alcanza el mayor nivel de seguridad previsto por la FAA y Boeing. No obstante el documento incluye recomendaciones para fortalecer aún más cada uno de los procesos al interior de Boeing y la FAA.

"Acogimos con entusiasmo la oportunidad que nos presentaba esta revisión conjunta del B787 y su comportamiento en servicio", señaló Ray Conner, presidente y consejero delegado de Boeing Commercial Airplanes. “Las conclusiones de la revisión acreditan nuestra confianza tanto en el diseño del avión como en el proceso riguroso empleado, para identificar las incidencias de funcionamiento en el momento en que suceden. Quiero agradecer el gran trabajo que ha realizado el equipo encargado de la revisión conjunta y sus recomendaciones, que nos permitirán seguir mejorando nuestros procesos en el futuro", agregó.

Foto: Boeing
Las recomendaciones hechas por el CSRT son cuatro para Boeing. Tres de ellas inciden en mejorar la comunicación de la información, las normas técnicas y las expectativas entre la empresa y sus proveedores. Boeing comunicó oficialmente que “ya ha tomado medidas para aplicar estas recomendaciones”.  La cuarta recomendación insta a Boeing a seguir implementando y perfeccionando los procesos escalonados en los programas de desarrollo.

Por "proceso escalonado" se entiende como los estrictos criterios que se aplican cuando se desarrolla un nuevo modelo de avión. Con ello se consigue un nivel suficiente de madurez en un programa antes de que éste alcance hitos clave, como la finalización del diseño, el inicio de la producción y la entrada en servicio.

Boeing ha realizado diversas mejoras en sus procesos de desarrollo de aeronaves desde el comienzo del programa 787. Así, el año pasado se llevó a cabo una reorganización para reunir todos los programas de desarrollo de aviones comerciales en una única entidad.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Aunque tenga esa acreditacion yo no vuelo en el 87 por los proximos 2 anos.

Anónimo dijo...

BOEING ES EL PIONERO EN EL AVION DE FIBRA DE CARBONO, AIRBUS ES UNA COPIA...

Anónimo dijo...

El argumento vendría siendo.... ?