Qantas Group actualiza su plan de flota para poder acelerar su reestructuración y revertir las pérdidas

Por Ricardo J. Delpiano

Foto: Ricardo J. Delpiano

Con el fin de atender la situación financiera de la compañía y los desafíos futuros más inmediatos, Qantas Group presentó una actualización de su plan flota para los próximos dos años.

El holding -que incluye a la principal aerolínea australiana- orienta sus esfuerzos en proveer una maximización de las ventajas de una flota joven y competitiva, al mismo tiempo que acelera el retiro de los aviones antiguos y menos eficientes.

Según Alan Joyce, CEO de Qantas, el plan de flota se basa en cinco pilares: incrementar el uso de la flota disponible a nivel doméstico e internacional, “colocar el avión correcto en la ruta correcta”, ofrecer una mejor experiencia a los clientes, realinear la relación coste/beneficio de la nueva flota y simplificar la flota del grupo.

“Estamos usando nuestra flota de manera más eficiente con el fin de alcanzar nuestras metas del acelerado plan de transformación de Qantas”, señaló. Joyce Indicó además, que en los próximos tres años una reducción de costos por A$ 2 mil millones de los cuales A$ 600 millones serán derivados del plan de flota y de un ajuste en las rutas.

La compañía ha señalado que continuará invirtiendo en su flota para ofrecer una mejor experiencia de viaje al cliente.

La actualización del plan de flota incluye a todas las divisiones de Qantas Group, incluyendo a parte de JetStar y a la compañía regional Network Aviation.

Qantas International

En la división internacional de Qantas, se planea la sustitución gradual de todos los Boeing 747-400, a excepción de nueve ejemplares –incluyendo los -400ER- que poseen interiores similares al del Airbus A380. Se ha fijado el retiro de todos los B747-400 no reconfigurados para principios de 2016.

En las rutas asiáticas, los servicios operados con B747 serán reemplazados por A330, comenzando por los tramos Sydney – Singapur y Brisbane – Singapur a partir de septiembre 2014. Los B747-400 prácticamente quedarán en selectas rutas como Melbourne – Los Ángeles, Sydney – Los Ángeles y Sydney – Santiago.

Se planea un aumento de 5% de la flota internacional, para lo cual se reajustarán los horarios en el servicio Melbourne – Dubái y la asignación del A380 para la ruta a Dallas Ft. Worth.

La incorporación de cuatro B787-8 a JetStar permitirá la transferencia de tres A330-200 a la división doméstica.

Qantas Domestic

Al retiro de los B737-400 concretado en febrero para se sumará para este 2014 la salida de todos los B767-300ER. A partir de 2015, incrementará la utilización de la flota con una reducción de los periodos de turn around.

Todos los B737-800 pasarán a retrofit, incorporando nuevos interiores y configuración, ampliando la capacidad total en 3%. Todos estos aviones tendrán un nuevo sistema de entretenimiento a bordo en función a brindar una mejor experiencia de viaje al pasajero.

Los A330-200 en vuelos domésticos quedarán en rutas costa-costa y en rutas en la costa este dentro de alta densidad.

La aerolínea Network Aviation con base en Perth y perteneciente a Qantas Group también se verá afectada con la salida de todos los Embraer EMB 120 Brasilia para quedar conformada con una flota de 12 Fokker 100.

Reestructuración 2014 y 2015

Foto: Martín González

En 2014, Qantas Group recibió 23 nuevos aviones y retiró otros 19, regresando otros ocho a las respectivas compañías de leasing. En 2015, el grupo recibirá 10 nuevos aviones pero dará de baja a 18 y devolverá dos unidades. Adicionalmente, se pondrán a la venta dos B737-800 y dos Bombardier Dash 8-30, además de renovar los arriendos de dos A330-200 de Qantas Domestic, unidades que saldrán de la flota en 2016.

Qantas visualiza que el mercado doméstico australiano tendrá un desempeño menor y por lo tanto, planea una contracción de la capacidad (ASK). En sintonía con ese escenario, ya se han vendido cinco A320 de JetStar.

En febrero de este año, Qantas había anunciado la salida de 50 aviones y la eliminación de las rutas no rentables, además de un recorte de 5.000 empleados. A esto, se agrega ahora la reciente transformación del pedido de 21 A320ceo por un número similar de A320neo, lo que implica un retraso en la llegada de estos equipos. Ahora, Qantas Group posee un pedido por 99 A320neos.

Siguiendo la cancelación de 35 B787 en 2012, Qantas retrasó para 2016-2017 las opciones por 50 B787-9. También han retrasado los tres últimos de 14 B787-8 de JetStar, además de los ocho A380 pendientes de entrega.

Qantas Group ha señalado que mantiene contratos de gran flexibilidad con los respectivos fabricantes y las compañías de leasing, como una forma de ir ajustando la capacidad de cada una de las aerolíneas en función a cada escenario.

El grupo anunció pérdidas significativas por A$2,8 mil millones para los últimos 12 meses terminados el 30 de junio, lo que le genera un panorama extremadamente complejo para la aerolínea. Conscientes de la situación, Qantas Group busca generar sinergias en las distintas unidades de negocios para visualizar una salida rápida.

Además de su situación interna y de la alianza con Emirates, Qantas sigue presionada por la competencia – doméstica (Virgin Australia) e internacional- y una desaceleración económica interna de Australia. Anteriormente, las pérdidas del negocio internacional eran compensadas por los buenos resultados del negocio doméstico, pero con la desaceleración interna este último también ha tenido una baja.

La situación de Qantas contrasta con el crecimiento de Virgin Australia (apoyada por Etihad Airways) y de su vecina Air New Zealand, que a pesar de tener un mercado menor está consiguiendo mejores resultados. Ante un panorama más complejo, Qantas Group se está viendo presionada para vender activos para conseguir financiamiento a corto plazo.