Por Ricardo J. Delpiano
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A350-900 de Delta. Foto: Airbus |
Los nuevos aviones están en sintonía con las proyecciones de capacidad y el plan de gasto de Delta, los que se mantienen dentro de las directrices de la empresa de hacer inversiones prudentes y rentables para su flota en medio de un escenario de alta competencia.
“Delta siempre toma las decisiones de flota con un balance de eficiencia económica en combinación con una mejor experiencia al cliente, integración de la red y costo de propiedad”, dice Nat Pieper, vicepresidente de Estrategia y Operaciones de Flota de Delta Air Lines.
Las entregas se producirán a partir de 2017 con los primeros A350-900 para luego continuar hacia 2019 con el A330-900neo. La compañía señala que estos dos modelos estarán orientados a reemplazar a los antiguos y menos eficientes Boeing 747-400 y B767-300ER.
Comenzando en el segundo trimestre de 2017, el A350-900 será el encargado de jubilar al B747-400 y operará en rutas transoceánicas, principalmente a través del Pacífico. Esta nueva flota, le dará a Delta una mayor eficiencia operacional además de una mejor posición para competir con sus rivales (como United, que está comenzando a utilizar el B787 en esas rutas). El A350-900 entregará ahorros en costos en un hasta 20% en comparación con el Jumbo Jet.
El A330-900neo entraría en servicio en 2019 y tendrá la misión de reemplazar a los B767-300ER en vuelos trasatlánticos y en algunos servicios hacia Asia desde la costa oeste de los Estados Unidos. Asimismo, complementará las operaciones de la actual flota A330 sobre la cual se está optimizando parte de los vuelos de larga distancia. Tras su incorporación, los B767-300ER más antiguos serán dados de baja dejando a los equipos más nuevos para rutas internacionales de menor densidad o con mayor sensibilidad de demanda. El A330-900neo entregará ahorros en costos por 20% en comparación con los B767.
De esta manera, Delta espera operar en los próximos años una flota combinada de aviones Airbus y Boeing, las que según Pieper “proveerán una flexibilidad excepcional para la red global con un fuerte retorno financiero para los accionistas”.
Por ahora, la aerolínea con base en Atlanta no se ha referido respecto al futuro de su flota B767-400ER o B777-200ER/LR. Si bien continuarán en servicio por unos años más, se deja la opción para explorar futuros pedidos hacia las versiones de mayor capacidad del A350 o quizás el B777-X, este último sólo si la compañía quisiera atender vuelos de ultra larga distancia y alta densidad de pasaje. No obstante, la colocación de los A330-900neo en vuelos trasatlánticos implicará la salida o reubicación de los B777 actualmente en servicio, los que producto de la alta competencia están entregando una sobre oferta en esos mercados.
El plan de renovación de Delta ya ha tomado forma en la flota de corto y mediano alcance con la introducción de los B717, B737-900ER y los Bombardier CRJ900 para operaciones regionales. Además está prevista la incorporación futura de 45 A321ceo.
Como parte de su integración con Northwest (NWA), Delta Air Lines opera actualmente una flota Airbus compuesta por 57 A319ceo y 69 A320ceo, más A330-200 y 21 A330-300. La aerolínea mantiene órdenes ya anunciadas por 10 A330-300.
2 comentarios:
Deberían de desprogramar los 717.
Poco tiene que ver el 717 con la flota de largo alcance
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