martes, 17 de marzo de 2015

Martinair Cargo reducirá al mínimo su flota para 2016 en sintonía con el plan Perform 2020 de Air France-KLM

Por Ricardo J. Delpiano

Martinair MD11F (A.Ruiz)
Foto: Alejandro Ruiz
De acuerdo con lo establecido en el plan Perform 2020 de Air France-KLM, Martinair Cargo reducirá al mínimo su flota de aeronaves cargueras ajustando drásticamente la capacidad de carga (en términos de ATK) a nivel global.

La decisión se enmarca dentro del plan de Air France-KLM para volver a la rentabilidad financiera y tendrá un fuerte impacto en las operaciones y fuerza laboral de las unidades de carga, comenzando por Martinair. La compañía estima que la medida afectará a más de 300 empleados, incluyendo personal en tierra y pilotos.

El plan consiste en la salida de todos los McDonnell Douglas MD11F de la flota para estandarizarla en el Boeing 747-400F, aunque con un mínimo de unidades para el grupo. El proceso comenzará este año y se extenderá hasta mediados de 2016. Actualmente, Martinair opera una flota de un B747-400F y seis MD11F.

A partir de mediados del próximo año, la flota combinada de carga de Air France, KLM y Martinair, quedará reducida a sólo dos B777F (Air France Cargo) basados en París Charles De Gaulle y cuatro B747-400F (KLM - Martinair Cargo) basados en Ámsterdam Schiphol. Este pequeño número de cargueros se utilizará sólo para operaciones claves o cargas de gran tamaño. Para el resto de las operaciones cargueras, el grupo utilizará la capacidad disponible en los bellies de sus aviones de pasajeros y en el apoyo de la flota de 15 B747-400C (Combi) de KLM.

La red de carga quedará concentrada en el Norte de África, Centro y Sudamérica, principalmente en países relacionados con el mercado de las flores. La compañía también continuará atendiendo en otras unidades de carga como productos farmacéuticos, carga express y comercio electrónico.

Air France-KLM ha dicho que no se retirará del negocio de la carga, ya que a pesar de la reducción de la flota, la unidad de mercancías representa un aporte significativo al negocio con ingresos de más de 2,5 mil millones de euros por año.

"Dar un paso como este, tiene un enorme impacto en la organización de KLM y Martinair. Se exploraron varios escenarios que resultaron insuficientes para hacer frente a las pérdidas. Lamentamos profundamente las consecuencias sociales, pero estas medidas son inevitables si se quiere tener un negocio de carga viable en el futuro”, dijo Marcel de Noojer, director de Martinair.

Martinair espera reasignar a la mayor parte del personal al interior de KLM y consultará con los sindicatos las acciones a seguir. Los recortes se producirán principalmente donde se produzca un exceso de personal. Entre las opciones exploradas están en retiro voluntario o la opción para los pilotos de pasar a formar parte de Transavia, aunque con un menor salario. Pese a los esfuerzos y a las conversaciones en base al contrato colectivo, la empresa no descarta recurrir al despido forzoso.

“En los últimos meses, hemos estado en conversaciones con el directorio de la empresa y nos hemos tomado mucho tiempo para investigar una serie de escenarios. La decisión de ajustar la flota de carga se ha tomado después de un análisis muy cuidadoso”, puntualizó Noojer.

Air France-KLM tomó la decisión de reducir drásticamente su unidad de carga en septiembre de 2014, cuando presentó el plan Perform 2020 para hacer frente a un escenario altamente desafiante y aprovechar las oportunidades de crecimiento que se presentan. El grupo espera conseguir hacia 2017 un aumento del EBIDTAR entre 8%-10%, con empresas capaces de generar un flujo de caja positivo y asegurar una deuda controlada.

En los últimos años, Martinair se ha visto sometida a varios ajustes y transformaciones como empresa. Las medidas tomadas han incluido, entre otras acciones, el fin de los vuelos de pasajeros (regular y chárter) y la reducción de sus operaciones cargueras.

A pesar de visualizarse una ligera recuperación, el negocio de carga a nivel global todavía se encuentra debilitado. Por lo mismo y con el objetivo de avanzar hacia una operación sostenible en el futuro, las líneas aéreas están reestructurando sus flotas en función de sus necesidades, mercados y tamaño de la red.

El crecimiento de la capacidad producto de la adquisición de nuevas aeronaves de pasajeros de gran tamaño (Airbus A380 o B777-300ER, por ejemplo) ha representado un aumento considerable de la oferta de carga, que ante un escenario débil debe ser atendida. Por lo mismo y con el fin de conseguir una mayor eficiencia en el negocio, las compañías están optando por maximizar el uso de bellies de sus aviones de pasajeros y reducir al mínimo sus aviones de cargueros.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Adiós a Martinair? Así parece.